Impacto del colesterol en la síntesis de hormonas esteroideas - estereidogénesis: Colesterol y hormonas
- Mariam M. Lara Nader
- 8 oct 2024
- 5 Min. de lectura
Actualizado: 14 ene
Más allá de las proteínas, nuestro cuerpo utiliza las grasas para producir una amplia gama de hormonas. Las hormonas lipídicas, como los esteroides y los eicosanoides, son mensajeros químicos esenciales que regulan desde la inflamación hasta el crecimiento celular. ¡Descubre cómo funcionan!
Las hormonas lipídicas o liposolubles se clasifican en dos grupos según su origen y función:
a) las hormonas esteroideas, que provienen del colesterol.
b) los eicosanoides, que se derivan de las grasas de nuestras células y participan en procesos como la inflamación y la inmunidad (prostaglandinas, tromboxanos, leucotrienos).
Las hormonas esteroideas son pequeñas moléculas que viajan por la sangre unidas a proteínas. Como son solubles en grasa, pueden atravesar fácilmente las membranas de las células. Las hormonas esteroideas son producidas por diferentes glándulas:
1) Glándulas suprarrenales: cortisol y aldosterona.
2) Los ovarios (estrógenos y progesterona).
3) La placenta (estrógenos y progesterona)
4) Tejido adiposo.
Tejido adiposo
La capacidad del tejido adiposo (grasa) para producir hormonas esteroideas se debe a la presencia de enzimas clave involucradas en la vía de la estereidogénesis o creación de esteroides. Estas enzimas permiten al tejido adiposo convertir precursores hormonales, como la androstenediona, en hormonas biológicamente activas, como la estrona (una de las tres formas principales de estrógenos).
Importancia de la estereidogénesis en el tejido adiposo:
Influencia en la distribución de la grasa corporal: Los estrógenos producidos en el tejido adiposo pueden influir en la distribución de la grasa corporal, favoreciendo la acumulación de grasa en ciertas regiones del cuerpo.
Papel en enfermedades metabólicas: La alteración de la estereidogénesis en el tejido adiposo se ha asociado a diversas enfermedades metabólicas, como el síndrome metabólico o síndrome de ovario poliquístico por resistencia a la insulina.
La inflamación crónica puede alterar la estereidogénesis en el tejido adiposo.
Impacto del colesterol en la síntesis de hormonas esteroideas - estereidogénesis.
El colesterol es un componente esencial de nuestras células, pero también es el bloque fundamental para la producción de hormonas sexuales. Estas hormonas, como los estrógenos, progesterona y andrógenos, son responsables de características físicas y funciones importantes en hombres y mujeres.
La transformación del colesterol en una hormona esteroidea se lleva a cabo en dos pasos:
El colesterol se convierte en pregnenolona por la enzima desmolasa, situada en las mitocondrias de las células productoras de esteroides.
El colesterol: la materia prima.
La desmolasa: la enzima clave. La desmolasa, también conocida como citocromo P450scc, es una enzima ubicada en la membrana interna de las mitocondrias de las células productoras de esteroides.
Su función principal es catalizar la conversión del colesterol en pregnenolona.
Las mitocondrias son las "centrales eléctricas" de la célula porque proporcionan la energía necesaria para las reacciones químicas que convierten el colesterol en pregnenolona. Las mitocondrias proporcionan un ambiente rico en oxígeno y enzimas que favorecen la reacción catalizada por la desmolasa.
La pregnenolona: el primer intermediario: La pregnenolona es el primer compuesto en la vía de síntesis de todas las hormonas esteroideas. Una vez formada, puede seguir diferentes rutas metabólicas para dar lugar a distintos tipos de hormonas.

Posteriormente, las células de la granulosa del ovario pueden almacenar pequeñas cantidades de hormonas esteroideas sintetizadas previamente. Esto permite una liberación más sostenida y regulada de la hormona, en lugar de una liberación inmediata y masiva tras cada síntesis.


Una vez sintetizadas, las hormonas esteroideas deben ser transportadas a través de la sangre hasta sus células diana. Este proceso involucra la unión a proteínas transportadoras, lo que puede influir en la velocidad y la duración de su acción (hormona total y hormona libre).
La liberación de hormonas esteroideas está sujeta a complejos mecanismos de regulación, tanto a nivel celular como a nivel sistémico. Diversos estímulos y neurotransmisores pueden modular la síntesis y la liberación de estas hormonas.
Las hormonas esteroideas tienen una vida media variable en el organismo. Algunas se degradan rápidamente, mientras que otras pueden permanecer activas durante horas o incluso días.
colesterol
Aunque nuestro cuerpo puede producir colesterol, también lo obtenemos de los alimentos que comemos. Colesterol y hormonas: Este colesterol viaja en la sangre a través de lipoproteínas. Las lipoproteínas son como paquetes que transportan colesterol y otras grasas en la sangre.
El colesterol es la base de nuestras hormonas sexuales. Todos nuestros órganos que producen hormonas, excepto la placenta, pueden crear colesterol a partir de moléculas muy simples. Este colesterol es como un bloque de construcción para hacer hormonas como la progesterona, la testosterona y el estrógeno.
En el ovario, estas hormonas se fabrican directamente a partir del colesterol. Sin embargo, el cuerpo no siempre produce suficiente colesterol por sí solo. Por eso, tomamos el colesterol de los alimentos y lo transportamos en la sangre a través de unas partículas llamadas lipoproteínas de baja densidad (LDL). Estas LDL "entrega" el colesterol a las células del ovario, donde se usa para hacer las hormonas necesarias.
Las lipoproteínas son como pequeñas burbujas que transportan grasas en la sangre. Hay diferentes tipos de lipoproteínas, cada una con un tamaño y una densidad distintos. Estas burbujas se van transformando unas en otras, y así el cuerpo transporta las grasas donde se necesitan.
Quilomicrones: son partículas grandes, muy grandes que transportan colesterol (10%) y triglicéridos (90%) formadas en el intestino después de una comida con alto contenido de grasas. Los quilomicrones se forman en el intestino después de una comida con un alto contenido de grasas. Son pequeños paquetes que recogen la grasa de los alimentos e inician su transporte a distintas partes y rutas de nuestro metabolismo.
Lipoproteínas de Muy Baja Densidad (VLDL) Transportan principalmente triglicéridos, son más densas que los quilomicrones, aunque también transportan grasas. También transportan colesterol, pero principalmente triglicéridos; más densas que los quilomicrones.
La enzima que descompone los triglicéridos en las VLDL, la lipoproteína lipasa, es sensible a las hormonas sexuales. Los estrógenos pueden reducir la actividad de esta enzima, mientras que los andrógenos pueden aumentarla.
Lipoproteínas de Densidad Intermedia (IDL) Son partículas que se forman a partir de las VLDL cuando se les quitan algunos de los triglicéridos que contienen. Son consideradas partículas transitorias porque no duran mucho tiempo dentro de nuestro cuerpo y se transforman rápidamente en otras lipoproteínas.
Lipoproteínas de Baja Densidad (LDL) Son pequeños paquetes que transportan colesterol en la sangre. Son los principales responsables de llevar colesterol a las células de todo el cuerpo. Sin embargo, cuando hay demasiadas LDL en la sangre, pueden acumularse en las arterias, formando placas que pueden obstruir el flujo sanguíneo y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Las partículas de baja densidad LDL se forman a partir de las VLDL cuando estas liberan la mayor parte de su grasa, se convierten en LDL. Son consideradas el “colesterol malo” sin embargo, son necesarias para el funcionamiento y equilibrio hormonal. El colesterol que transportan es esencial para la construcción de tejido y la estereidogénesis.

En este artículo hemos explorado el fascinante mundo del colesterol y su papel en la producción de hormonas esteroideas. Hemos visto cómo el hígado es el principal órgano encargado de su síntesis y cómo diferentes factores, como la dieta y el estilo de vida, pueden influir en nuestros niveles. Tu salud hormonal ovárica depende en gran medida de tu salud hepática.
Al comprender los mecanismos detrás del metabolismo del colesterol, estamos más capacitados para tomar el control de nuestra salud. Recuerda que cada pequeño cambio en nuestros hábitos puede marcar una gran diferencia a largo plazo. Recuerda que el colesterol y tus niveles hormonales son un tema complejo y cada persona es única. Si tienes inquietudes sobre tus niveles de colesterol consulta a tu profesional de salud.
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Colesterol y hormonas
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